Resumen anual musical de la Escuela de Música Amati de la Asociación Fernheim

 

El año escolar de Amati comienza simultáneamente con las otras escuelas. Las clases individuales en el instrumento elegido permiten atender de manera personalizada a cada estudiante y acompañarlo en su descubrimiento del mundo de la música, así como en los aspectos técnicos.
El año empezó de forma emotiva con un concierto en el Día de los Enamorados. El 1 de junio se celebró por primera vez la Fiesta Familiar AMATI, ya que en la Escuela de Música Amati, a diferencia de una clase regular, hay pocas oportunidades de encuentro entre los estudiantes.
Los ensayos semanales de orquesta de los estudiantes de Amati ofrecen la oportunidad de aplicar lo aprendido en las clases y, en grupo, mejorar la armonía y el ritmo, con resultados impresionantes.
El concierto "Forever" tiene una larga tradición y cada año se centra en un tema específico. Debido al gran tamaño de la orquesta y al valor de cada músico, regularmente surge un problema de espacio en el auditorio, por lo que el concierto se presenta 2-3 veces para dar cabida al público.
En julio se realizó un seminario intercolonial de flauta traversa, donde 70 participantes tuvieron una semana para preparar un concierto exigente. El maestro invitado, Francesco Cama de España, realizó un trabajo meticuloso, logrando un concierto versátil e impresionante, que fue muy bien recibido.
En octubre, el conjunto “Querblech” de Alemania visitó la escuela de música. El festival de canto y música del 13 de octubre se convirtió en un auténtico momento destacado, gracias a su participación y la del Orquesta Amati.
Entre estos eventos, también se organizaron "conciertos" informales en la Churrasquería Florida, donde algunos estudiantes pudieron presentarse.
Para el gran concierto de cierre de la Escuela de Música Amati, este año se decidió trasladarse a Loma Plata, para superar la limitación de espacio. El domingo 3 de noviembre, se celebró allí un impresionante concierto con un total de 100 músicos en el escenario, entre ellos cuerdas, vientos y cajoneros. A menudo, en esta ocasión, dos generaciones de una misma familia tocan juntas. El director de todas estas presentaciones orquestales es Kenneth Hildebrandt.
Actualmente están en marcha los recitales de fin de curso, en los que cada estudiante tiene la oportunidad de presentar una pieza de su repertorio, sumando unos 15 valiosos "conciertos" en nuestra escuela de música.
Los estudiantes que decidieron tomar un examen deben presentar su prueba en noviembre, lo cual les permite documentar su progreso y, algún día, convertirse en maestros de su respectivo instrumento.
Y como dice acertadamente Doris Klassen, la directora de la Escuela de Música Amati: “Con esto termina el año musical y sigue una breve pausa, antes de que comience el ‘da capo’ nuevamente.”







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